Estos son los procedimientos quirúrgicos más comunes para la cirugía de hemorroides o 
                almorranas.
                Trombectomía
				
                Este procedimiento quirúrgico menor puede realizarse a nivel ambulatorio, y 
                suele ser una elección para casos leves de
                hemorragias externas 
                como en el caso de las que se producen durante el embarazo.
                Consiste en la eliminación de los coágulos de sangre que se hayan formado en las 
                hemorroides externas, así como la desecación de pequeñas hemorroides.
                Técnica PPH o Procedimiento para prolapso de hemorroides
                Este técnica lleva realizándose pasa el tratamiento de las hemorroides durante 
                casi 20 años y su porcentaje de éxitos ronda el 95% de los casos.
                Esta tipo de
                cirugía de hemorroides 
                fue inventada en 1993 por el Dr. Antonio Longo y aunque es un procedimiento quirúrgico, está a 
                medio camino entre la cirugía convencional y los procedimientos no quirúrgicos.
                El PPH consiste en la eliminación de las hemorroides a través de una extirpación 
                circular realizada por un instrumento especial que extirpa y autosutura mecánicamente.
                Este procedimiento está indicado para las
                hemorroides prolapsadas 
                que están por encima de la línea pectínea y por lo tanto carecen de sensibilidad al dolor, aunque 
                también puede utilizarse para la extirpación de algunas hemorroides externas.
                El PPH se puede realizar únicamente con anestesia local y sin hospitalización 
                alguna.
                Hemorroidectomía
                Este procedimiento únicamente está recomendado para los casos de
                hemorroides internas 
                de grado 3 y 4, o en casos en los que lo procedimientos menos invasivos han fracasado.
                La hemorroidectomía puede realizarse con anestesia local, epidural o general 
                dependiendo del caso y de las preferencias del doctor.
                Este procedimiento consiste en la eliminación de las
                hemorroides 
                por medio de cirugía convencional.
                Las técnicas más populares en la actualidad son la técnica abierta 
                Milligan-Morgan y la técnica cerrada Ferguson. En la primera de ellas de deja la herida abierta 
                para que cicatrice sola, y en la cerrada se realiza una sutura de la herida.
                En la hemorroidectomía cuenta con la desventaja de una recuperación bastante 
                larga que suele durar de 4 a 6 semanas, que frecuentemente es dolorosa. También suele provocar una 
                secreción olorosa desagradable durante este periodo bastante incómoda.
                Hemorroidectomía externa
                Consiste en la desecación de pequeñas hemorroides externas.
                A diferencia de la hemorroidectomía general esta puede realizarse 
                ambulatoriamente.